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El 27 de mayo, el Centro Internacional Sueco para la Democracia Local (ICLD) y el OIDP organizaron un debate con líderes locales para compartir sus experiencias personales con los presupuestos participativos en sus ciudades. Los ponentes explicaron cómo han trabajado en el proceso para que más personas decidan sobre el presupuesto municipal y cómo deben gastarse los fondos públicos para contribuir a un compromiso más democrático. La mesa redonda fue moderada por Ana María Vargas, Directora de Investigación del ICLD. 

Iryna Skaliy, responsable de programas de la Embajada de Suecia en Ucrania, presentó la política drive for democracy (impulso a la democracia): el principio de seguir los valores democráticos y apoyar la democracia en todos los contextos. En Ucrania, el impulso a la democracia se centra en la lucha contra la corrupción, la garantía del Estado de Derecho, el apoyo a instituciones públicas más fuertes, la lucha por la igualdad de oportunidades y el crecimiento económico. La descentralización fue también una importante reforma implementada: eso significó abrir la igualdad de oportunidades a los miembros y realizar su potencial para construir una vida mejor en la comunidad. 

Oleksandr Syenkevych, alcalde de Mykolaiv (Ucrania), explicó que empezaron a aplicar el presupuesto participativo para implicar a los ciudadanos en la vida pública de forma más democrática. Subrayó la importancia de visitar otros países que ya habían implantado esta experiencia. Esto le sirvió de inspiración para tomar la decisión de presentar el presupuesto participativo en Ucrania. También subrayó cómo, gracias a estos procesos, la gente empezó a entender su responsabilidad en lo que puede ocurrir en la ciudad.

Anna-Carin Magnusson, alcaldesa de Nässjö (Suecia), explicó que empezaron a aplicar los presupuestos participativos hace cuatro años, y destacó el compromiso de los jóvenes, los niños y sus padres. El presupuesto participativo es una forma inspiradora de aprender la inclusión, la ciudadanía y la democracia para los jóvenes.

Peter Jansson, alcalde de Åre (Suecia), habló de su experiencia cuando fue elegido y fundó el Comité para el desarrollo del municipio. En este contexto político, pudo encontrar personas que se inspiraron en los presupuestos participativos como él. Además, el dinero disponible para estos procesos también estaba limitado en el tiempo: había que gastarlo antes de finales de 2020, por lo que había que tomar una decisión rápidamente. 

Marc Serra, secretario general del OIDP y concejal de Barcelona, destacó que en tiempos de crisis, como la pandemia, hay que preservar la participación ciudadana.  Este fue el principal reto de la implantación del presupuesto participativo, pero no el único: el perfil de los participantes en el ejercicio también fue una tarea a la que hubo que hacer frente. De hecho, sólo la gente de clase media tendía a participar y era muy difícil que los inmigrantes se involucraran, por lo que Marc Serra explicó cómo han estado trabajando en solucionar este desafío : se centraron en comunidades de orígenes diversos para identificar los proyectos que podrían tener y animarles a presentar la propuesta.

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